Pasé hace unos dias a visitar un blog amigo "Evolución Cristal", y me encontré con ésta nota que hoy quiero compartir.
A lo mejor es nuestro trabajo alinearlos (corazón - mente - cerebro - razón). De nosotros depende el equilibrio que podamos lograr.
Por
Dra. Liliana Szabó.
La semana pasada, mientras iba manejando camino al consultorio en uno de esos tan preciados momentos de estar a solas, poner el "piloto automático" y dejar que la mente vaya hacia donde quiera que desee ir, escuché al azar en la radio que "el corazón nunca tiene cáncer".
Este comentario, que alcancé a registrar como figura destacada sobre un fondo indefinido al que no le estaba prestando atención, me golpeó de frente como un cachetazo.
Personalmente visualizo al cáncer como una especie de "bolsa de basura" que el organismo produjo y no llegó a sacar a la vereda a tiempo antes de que pase el camión recolector.
Desde mi punto de vista absolutamente personal y entrando en el puro campo de la teoría y la imaginación, si el lector me lo permite, visualizo al ser humano produciendo constantemente deshechos físicos, psíquicos, emocionales y mentales.
¡Cuántos pensamientos inútiles pueblan constantemente nuestra mente! Nos preocupamos por anticipado por cosas que probablemente no ocurrirán jamás, quedamos anclados en alguna idea fija acerca de algo poco importante (como por ejemplo si la vecina dejó de saludarnos porque no nos vio o porque nos ignoró), damos vueltas una y otra vez a los mismos viejos temas del pasado y de esta forma les damos vida haciéndolos innecesariamente presentes.
Nos contaminamos a nosotros mismos con emociones dañinas que aún no hemos aprendido a equilibrar. Dejamos que el enojo nos queme en su fuego destructivo, permitimos que el miedo nos paralice, que el resentimiento nos reseque de a poco, le damos la bienvenida a los celos, navegamos en la envidia (y nos regodeamos de ello).
Nuestras creencias añejas y a veces inservibles nos hunden en problemas que podríamos superar fácilmente si fuéramos capaces de movernos de nuestro cómodo lugar del "yo soy así y no voy a cambiar".
Toda esta "basura" mental, emocional y psíquica, que parece no tener masa ni peso, de a poco se va compactando y pasa de ser una energía sutil e invisible, a ser una energía sólida y física. Y entonces aparecen los síntomas en nuestro cuerpo. Se acumulan células anormales en algún lugar y el diagnóstico nos hace entrar en pánico porque creemos que "algo maligno" nos está atacando de afuera, sin darnos cuenta de que nosotros mismos hemos ido creando el "monstruo" lentamente. Lo hemos creado día a día con nuestra forma de pensar, con nuestra manera de conectarnos con la vida y con las demás personas, lo hemos diseñado paso a paso con el trato que nos hemos dado a nosotros mismos.
El corazón está en constante movimiento. Sístole y diástole están en total armonía y perfecta sincronización: un tiempo para trabajar y otro para descansar. Pero el resultado final es un constante fluir de sangre que nos da nada menos que la vida. Tal vez por eso no es capaz de acumular "basura". No se detiene a pensar si el glóbulo rojo que está pasando en ese momento por sus cavidades es mejor o peor que el que pasó antes. Deja que todo lo que le llega circule permanentemente. No se adhiere a nada. Me gustaría decir que tiene una "actitud zen" en su continuo fluir y dejar ser.
¿Por qué no aprender de nuestro propio corazón?. Podríamos, por ejemplo, ocuparnos solo de lo que nos llega en cada momento, sin intentar retenerlo ni apropiarlo ni acumularlo. Podríamos aprender a limpiar nuestro desván de ideas para mantenerlo siempre abierto a lo nuevo, a lo fresco. Podríamos reconocer nuestras emociones para mejorarlas lo antes posible.
Tal vez así, como nuestro corazón, no seríamos capaces de desarrollar enfermedades malignas. Con el remedio homeopático podemos abrir la ventana que nos ayude a ventilar lo que hace mucho tiempo que no limpiamos. Un buen medicamento bien elegido a veces deshace en poco tiempo emociones que hace años estamos intentando dominar y que nos enferman. De esta forma nos abre el camino a cualquier otro tipo de terapia y autoconocimiento que deseemos elegir.
Nuestros niños a veces desarrollan cáncer y siempre me he preguntado el porqué. No tengo una respuesta clara, pero teniendo en cuenta mis razonamientos previos, creo que si en la familia, en la escuela y en la comunidad en general, los ayudamos a metabolizar sus emociones y experiencias con amor, vamos a ejercer una prevención considerable.
Seamos como nuestros corazones: nademos con la corriente del río de nuestras experiencias sin aferrarnos a ninguna.
Publicado por Kreski de Evolución Cristal
asombroso descubrimiento,nunca tampoco me puse a pensar de que el corazon carece de esta enferdad,abria de ver el por que,aunque al menos ya es un respiro en saber de que nuestro corazon es independiente del resto de nuestro cuerpo.mesno mal quees como una gran coraza que lo resguarda,aunque hay que cuidarlo de no darle tantos digustos.
ResponderBorrarun abrazo luz y feliz fin de semana!!!!!!!!!
muy interesante lo que cuentas..
ResponderBorrarno lo sabía!!
siempre hace bien pasear por tu espacio..
graciassssssss
besitos
Maravilloso que la Dra. Szabó sea parte de los que creemos que la enfermedad es un aviso, que las personas somos un Todo.La enfermedad
ResponderBorraravisa de la desarmonia del alma. Para recuperarla y sanar,como vos sugerís, Luz del Alma, tenemos que estar alineados, y ese es nuestro trabajo. Valora el estar presente, y reconoce las terapias alrenativas y complementarias.Somos,cada vez,más. Me parece que la homeopatía es parte del total; yo no la pondría ni primera ni segunda. Lo que producimos equivocadamente,siento que es -si estoy atenta y abierta,dispuesta- lo que necesito y me sirve para aprender.Saludo a mis compañeros de camino. Mirta, gracias y un abrazote. Susana
Muy buen fin de semana para cada uno de nosotros!!!
ResponderBorrarLa verdad Sony es que yo tambien lo desconocía, por eso me llamo la atención, y por supuesto claro que hay que cuidar mucho nuestro corazón...
Abrazo de luz, Mirta
Gracias Adrisol, me encanta verte por acá. Un abrazote, Mirta
Sandra, gracias por pasar, hermoso el verso, nos necesitamos Todos.
Abrazo de luz, Mirta
Hola Susana, gracias por el comentario. Sí que somos cada vez más sumándonos al Uno.
Un fuerte abrazote de luz, Mirta
Hola Mirta,,,,maravilloso e interesante lo que relatas,,,,y es verdad; no es bueno acumular tanta "basura",,,es mejor limpiarnos de todo lo que nos pueda hacer daño y tratar de vivir lo más armoniosamente posible!!!!me encantó leerte amiga!!!!!
ResponderBorrarBesitos y feliz fin de semana!!!!
Que interesante lo que nos cuentas Mirta, hay que tratar de "viajar lo más liviano que se pueda".
ResponderBorrargracias por la información!Siempre aprendemos algo nuevo.
Buen Fin de Semana!
abrazosss!
El corazon nunca tiene cancer, pero si se infarta y tambien tiene problemas, si no lo cuidamos se enferma, mas la cosa es que alli dentro de nuestro corazon recide la intuicion, que es otra forma de tomar decisiones, a veces sentimos como nos golpea para avisarnos, y tambien avistamos la presencia del Padre, alli el se guarda para cada uno de nosotros y muy dentro de nuestro corazon sentimos su luz....
ResponderBorrarGracias Ilusión, esa es la idea, estar en armonía.
ResponderBorrarAbrazo fuerte de luz y Buen Fin de Semana!
Gracias CHRISSSSSSSSSSSSSSSSS, ABRAZOTE GIGANTE DE LUUUUZZZZZZZZZZZ
Mirta
Si Adriana, "viajar lo más liviano que se pueda". Aprendamos rápidoooooo...
Abrazo de luz, Mirta
Toda la razón Janeth, es por eso que debemos escucharlo con mucha atención, habla con la Verdad.
Abrazote, Mirta